Laboratorio de Neurobiología del Envejecimiento

Líneas de Investigación

Nuestro laboratorio estudia el complejo proceso de envejecimiento del cerebro, teniendo como Objetivo General comprender de qué manera se afectan las funciones de distintas poblaciones celulares cerebrales, tanto en el contexto del envejecimiento fisiológico como en el contexto de patologías asociadas a la edad, y cómo estos cambios repercuten sobre la memoria y el comportamiento. La expectativa de vida ha aumentado considerablemente en la población en general y en nuestro país, de manera que se hace necesario conocer más sobre cómo envejece el cerebro, para diseñar estrategias que permitan aumentar la cantidad y calidad de vida. Una de las enfermedades asociadas al envejecimiento es el Alzheimer (AD) que se está convirtiendo en una verdadera epidemia. Nuestro acercamiento al problema es a través de modelos animales (ratones transgénicos) que permiten estudiar ciertos aspectos de la enfermedad humana, modelos de células en cultivo, cortes de cerebro de pacientes post mortem y bases de datos (en colaboración con FLENI). Estudiamos características de la inflamación que se produce durante el envejecimiento normal o en presencia de AD de algunas áreas del cerebro especialmente vulnerables que son aquellas encargadas de los procesos de aprendizaje y memoria y la emocionalidad. Estudiamos distintas poblaciones celulares del cerebro, tales como neuronas, células de la glía y endotelio. Estudiamos la vasculatura cerebral y su relación con las proteínas amiloides propias de la AD, la relación de la glía con los depósitos de estas proteínas que forman las placas seniles, entre otros ítems. Con pruebas conductuales podemos determinar si hay deterioro cognitivo. También estudiamos el efecto de la dieta con alto contenido graso sobre el proceso neurodegenerativo del envejecimiento normal y patológico, dado que ésta dieta se asocia a problemas cardiovasculares, dislipidemia, alto colesterol, diabetes, siendo estos últimos factores de riesgo para desarrollar AD. Así como la dieta puede influir negativamente en esta enfermedad y en el envejecimiento, también existen patrones alimentarios que pueden contribuir a la salud. Observamos que ratones que modelizan la AD expuestos a una restricción de alimento muestran mejoras en el estatus cognitivo y en parámetros cerebrales tales como la capacidad de generar nuevas neuronas en sitios específicos y un menor número de placas amiloides, entre otros. Como se ha mecionado, también realizamos acercamientos in vitro, logrando un modelo que paraleliza los eventos cerebrales mediante cultivo de células endoteliales y gliales en presencia de insultos metabólicos o péptidos amiloides similares a los que componen los depósitos.

Imágenes de investigación

Espinas dendriticas del hipocampo de un ratón control (arriba) y de un ratón que consume una dieta alta en grasas (abajo) en la que se detectan cambios morfológicos patológicos (imágenes obtenidas con un microscopio confocal).

Células de la glía en cultivo conteniendo beta amiloide, una de las proteínas que se acumulan en el cerebro en la enfermedad de Alzheimer (imagen obtenida con un microscopio confocal).

Izquierda: Cambios degenerativos en neuronas (DN) del cerebro de ratones que modelizan la enfermedad de Alzheimer. Derecha: Cambios patológicos en un astrocito (A) que rodea a un vaso sanguíneo cerebral en el mismo modelo experimental (imágenes obtenidas con un microscopio electrónico).